Una madre protectora

Texto de contratapa de Samanta Schweblin.

Lorenzo Roy, pintor bohemio y carismático exalcóholico, regresa a su círculo de amigos con una nueva mujer, Sigrir, con la que pronto se casará y tendrá un hijo. Pero quizá Sigrir no sea la tímida danesa que aparenta ser, ni ese hijo frágil e indefenso esté realmente a salvo con ella. Perdido en su desesperación, Roy recurre al narrador de este relato, quien muy pronto recibirá una revelación de la que será difícil recuperarse.
Con la intensidad y el ritmo de un thriller, esta historia invoca en sus últimas páginas la inminencia del horror, enfrentando al lector a la fina línea que divide la cordura de la locura, acorralándolo cara a cara con la verdad e imponiéndole la crudeza de una inquietud inevitable: ¿podría pasarme a mí? ¿Tan rápidamente podrían quitarme de las manos lo único que me sostiene en este mundo?
Una madre protectora es la nouvelle que cierra el libro de Guillermo Martínez Una felicidad repulsiva, galardonado en la primera edición del prestigioso premio Gabriel García Márquez. Inteligente, imprevisible y perturbador, sin duda este relato merece al fin su edición especial.